Arquitectos y profesionales del diseño, marketing y turismo unidos por el amor al diseño, la arquitectura, ecología, la vida sana y el contacto con la naturaleza conciben un hotel exclusivo, con vocación al pleno descanso.
En el Valle de Guadalest, con 25 suites de diseño arquitectónico exclusivo, este verano abre sus puertas Vivood Landscape Hotel, nacido de un estudio científico desarrollado por el arquitecto Daniel Mayo, a quien le acompaña un grupo de profesionales dispares pero unidos por una pasión común.
Su concepto se fundamenta en el estudio de la sostenibilidad en la arquitectura.
En sus comienzos sus 25 suites son alojamientos eco-friendly prefabricados de diseño único plegable y patentado, que consolidan la filosofía de los Hoteles Paisaje en la naturaleza.
Uso de una cimentación libre de hormigón reversible. Sistema pionero importado de Australia que además permite no tener que hacer grandes excavaciones.
Una apuesta por el turismo de evasión, entendido desde los parámetros del respeto al medio ambiente y de mimetización absoluta con la naturaleza, que invita a respirar, desconectar de la ajetreada vida diaria, y reencontrarse con uno mismo y con la naturaleza.
Se acomoda a la topografía. No se aterraza ni cimenta de manera agresiva.
Es un lugar para la evasión. Un lugar de respiro donde a las personas nos cambia la vida. Por ello el concepto es sólo para adultos, lo que garantiza el silencio y la calma.
A través de grandes ventanales se mantiene el contacto con el entorno tanto desde la habitación o del baño.
En un emplazamiento de 84 mil metros cuadrados de naturaleza pura, casi virgen se ha conservado o restaurado el paisaje local, evitando el uso de materiales invasivos, reflectantes o colores estridentes.
Aquí prima el lujo perceptivo, los alojamientos están en clavados en sitios privilegiados, separados para fomentar el silencio y contar con suficiente aislamiento para el descanso. Su diseño está pensado especialmente para que no exista intrusión visual, es decir, nadie puede ver el interior de los alojamientos cuando camina en el entorno.
En un hotel landscape te integras en la vegetación e integras a esta en el interior de la habitación. El mayor valor añadido se contempla a través de la ventana.
Se dispone de rincones naturales dentro de la parcela del hotel donde poder disfrutar de la naturaleza más salvaje con total privacidad. Ahí mismo se limita el tráfico rodado, sólo se manejan vehículos eléctricos de servicio.
Además de la arquitectura y decoración, el hotel es consumidor de productos locales que no han generado mucho CO2 en su producción. Disponen de un huerto ecológico que suministra alimentos para los desayunos.
Utilizan limpieza de habitaciones que promueven el ahorro de agua.
Toda la iluminación es de Bajo Consumo para el mínimo gasto. El sistema se apoya con energías renovables pues toda la cubierta del restaurante es una superficie de placas solares.
